Consejos y tutoriales

¿Cómo llevar el candado en la bicicleta?

Proteger tu bicicleta con un buen candado es fundamental. ¡Pero también hay que poder llevarlo sin complicaciones! Cuanto más resistente es un candado, más pesa, y su transporte puede convertirse rápidamente en un quebradero de cabeza para los ciclistas. Afortunadamente, existen varias soluciones prácticas para llevarlo contigo a todas partes. ¡Descubramos juntos algunos trucos para transportar fácilmente tu candado de bicicleta!

>> Sigue nuestra guía : ¿Cómo elegir el candado adecuado para tu bicicleta?

Llevar el candado directamente en la bicicleta

La solución más sencilla suele ser... ¡fijar el candado directamente a la bicicleta! Gracias a la geometría del cuadro y a los diferentes puntos de fijación disponibles, es posible colgar el candado de forma práctica y segura.

La fijación al cuadro

La mayoría de los candados en U se suministran hoy en día con un soporte de fijación específico. Este se fija al cuadro con dos tornillos y sujeta el candado mediante un pestillo, lo que permite colocarlo y quitarlo con un solo movimiento. Este sistema tiene la ventaja de ser discreto y ocupar poco espacio cuando se circula sin candado, lo que evita tener que desmontar y volver a montar el soporte cada vez que se sale. Lo mismo ocurre con los candados de cable, que se pueden fijar debajo del sillín mediante una fijación adaptada, una solución ligera y discreta para protecciones sencillas. En Zéfal, la mayoría de los modelos en U ya incluyen este tipo de fijación. También hemos desarrollado una nueva opción: ¡el K-Traz Holster! Universal y ajustable, este soporte permite transportar con total seguridad candados en U, incluidos los más pesados (hasta 4 kg), y se adapta a la mayoría de los cuadros. Por último, las abrazaderas como nuestra K-Traz Zip3 se pueden guardar... ¡en cualquier sitio!

Fijación al portabidones

Otra solución con los candados plegables. Al igual que nuestro K-Traz F16, la ventaja con respecto a otros candados es que se pueden guardar y almacenar fácilmente, al tiempo que mantienen un alto nivel de seguridad. Por lo general, disponen de una base que se fija a los tornillos del portabidones. Esta solución resulta discreta y práctica: el candado queda bien sujeto, no molesta al pedalear y respeta la estética de la bicicleta.

En el portaequipajes

Por último, si tu bicicleta está equipada con un portaequipajes, también puedes fijar una correa o un soporte adecuado para mantener el candado en su sitio. Esto permite transportar incluso los modelos más pesados, al tiempo que se distribuye el peso en la parte trasera de la bicicleta, una opción ideal para los ciclistas habituales, ya que permite transportar tanto las alforjas para el portaequipajes como el candado en el mismo lugar.

>> Siga nuestra guía : ¿Cómo mantener correctamente su candado?

El K-Traz Holster permite fijar el antirrobo al cuadro mediante correas.

Llevar un candado consigo

Cuando no es posible fijar fácilmente el candado a la bicicleta o se prefiere llevar el equipo siempre consigo, existen varias soluciones para transportar el candado. Este enfoque es especialmente apreciado por los ciclistas urbanos que realizan trayectos cortos con varias paradas para ahorrar tiempo, como los repartidores y los mensajeros...

La mochila: la solución más sencilla

La mochila sigue siendo la opción más utilizada. Permite llevar sin esfuerzo un candado en U, una cadena o incluso un modelo plegable. La ventaja es que el peso se lleva sobre los hombros y no se estorba nada en la bicicleta. Sin embargo, hay que asegurarse de fijar bien el candado para evitar que se mueva y dañe el resto de objetos. En trayectos largos, el peso adicional también puede resultar incómodo, sobre todo si ya se llevan otros objetos.

La fijación al cinturón

Para los ciclistas que quieren tener los hombros libres, la fijación al cinturón es una alternativa interesante. Estos sistemas, diseñados principalmente para candados en U, permiten deslizar el candado contra la cadera y tenerlo siempre a mano. Este método es especialmente práctico en la ciudad: el candado está accesible en pocos segundos y su peso se distribuye mejor que en una bolsa. Sin embargo, no es una solución adecuada para largas distancias o para ciclistas que pedalean de forma deportiva, ya que el roce contra el muslo puede resultar incómodo.

Llevar el antirrobo colgado al hombro

Algunas cadenas pesadas están diseñadas para llevarse colgadas al hombro, como una correa. Esto permite tener las manos libres y soportar el peso de forma equilibrada. Este modo de transporte resulta especialmente atractivo para los ciclistas urbanos que realizan paradas rápidas, pero no es nada adecuado para salidas largas, ya que la cadena puede resultar incómoda.

En resumen, llevar el candado contigo es una solución práctica y flexible, sobre todo en entornos urbanos, pero que muestra sus limitaciones a largo plazo, donde una fijación específica en tu bicicleta será mucho más eficaz y te ahorrará energía. ¡También te evitará olvidarte el candado al salir de casa! En cualquier caso, ahora ya conoce las diferentes soluciones que tiene a su disposición para llevar el candado en la bicicleta.